La superficie de la Tierra esconde un inmenso ecosistema, y hasta ahora no lo sabíamos

Dentro del marco que supone el proyecto de cooperación denominado “Deep Carbon Observatory” (DCO), un grupo internacional de científicos logró identificar una gran “vida profunda” en el fondo marino. Dentro de la cual se encuentran incluidos diversos microbios que posiblemente se han mantenido allí por miles de años.

¿Qué secretos esconde la tierra?

Todo esto ha sido resultado de una extensa investigación científica, la cual se desarrolló durante nueve años y hoy en día se encuentra llegando a su fin.

Los resultados de dicha investigación han indicado que el ecosistema más antiguo que existe en la Tierra se encuentra oculto dentro de sus profundidades, a una distancia de varios kilómetros bajo los pies del ser humano y además resulta ser increíblemente grande.

Y si bien es cierto que no es similar al que Julio Verne imagino, no se puede negar que sus habitantes, los cuales son esencialmente arqueas “zombis” y bacterias, indudablemente son igual de fascinante.

Además son bastante multitudinarios, tanto que forman un gran porcentaje de carbono (el cual se encuentra entre los componentes básicos de la vida), siendo alrededor de 385 veces más elevado que la cantidad de carbono producida por la suma de todos los seres humanos que se encuentran en la superficie del planeta.

Cabe mencionar que de acuerdo a las investigaciones, este grupo de científicos consiguió perforar el lecho marino a una profundidad de 2,5km, lo cual les permitió encontrar numerosas formas de vida que anteriormente eran desconocidas por completo.

Estas tienen la capacidad de mantenerse en este inmenso ecosistema rodeadas de condiciones de temperatura realmente severas y que además posee una presión extrema. Asimismo es preciso destacar que estos microorganismos persisten estando apenas vivos, ya que se mantienen en un estado cuyo movimiento es bastante pausado, similar al que tendría un “zombi”.

Condiciones presentes en este inmenso ecosistema

Tanto la temperatura como la profundidad media que posee cada uno de los océanos alrededor de la Tierra, está comprendida por unos cuatro grados centígrados y tiene aproximadamente cuatro kilómetros respectivamente.

Debido a que allí la presión resulta ser muy alta, incrementa una atmósfera con cada 10mt de profundidad, únicamente algunos pocos organismos tienen la capacidad de subsistir rodeados de dichas condiciones en las que además, es preciso agregar que predomina una oscuridad total, motivo por el cual es imposible usar la radiación solar para obtener energía.

Esta es la razón por la que dentro de esta clase de ecosistemas es posible hallar criaturas sumamente extrañas e inusuales.

Sin embargo, existen organismos capaces de subsistir dentro de condiciones mucho más extremas, justo debajo de la superficie terrestre, los cuales tienen una biomasa que resulta ser alrededor de 245-385 veces más grande en comparación con la que supone toda la humanidad.

Esto de acuerdo a lo indicado en la información publicada por DCO, que como ya mencionamos, se trata de una colaboración científica internacional, la cual podría ser un elemento clave a fin de entender el origen de la vida en mayor medida.

Así y de acuerdo con dicha información, las formas de vida que forman este inmenso ecosistema que hasta ahora era desconocido, las cuales como mencionamos son mayormente arqueas y bacterias, se tratan de organismos bastante antiguos y componen una biosfera que según lo estimado, representa un 70% de la comunidad bacteriana existente en el planeta.

Igualmente, se señala que su diversidad genética resulta ser igual o mayor en comparación con la de los organismos que se encuentran en la superficie y a pesar de que de acuerdo con los especialistas, su tamaño oscila entre 2.000-2.300 millones de kilómetros cúbicos, hasta el presente se había mantenido escondida.

agua mar

Descubrimiento de diversas formas de vida

Para poder llevar a cabo la publicación de dicha información, fueron precisos alrededor de nueve años de trabajo realizado por numerosos científicos pertenecientes al proyecto DCO, quienes se dedicaron a perforar el lecho marino a gran  profundidad, y a tomar muestras de vida de la corteza continental, a unos cinco kilómetros de profundidad de la misma.

De igual forma, los científicos del Deep Carbon Observatory lograron encontrar formas de vida eucariota, los cuales son organismos multicelulares mucho más evolucionados, dentro del inmenso ecosistema recientemente descubierto, aunque insisten en que la mayor parte se trata de bacterias y arqueas que poseen ciclos de vida completamente diferentes a los que tienen los demás organismos vivos presentes en el planeta.

En realidad y en ciertas ocasiones, la escala de los mismos podría consistir en millones de años, lo cual no sucede con sus homólogos que se encuentran alrededor de la superficie.

Los investigadores señalan que lo más extraño se trata de que varios de estos microorganismos han existido por miles de años y se encuentran metabólicamente activos, pero que consumen una menor cantidad de energía de la que consideraban precisa y con el fin de poder subsistir.

De la misma manera agregan que mientras más profundo se encuentren, estos microorganismos tienen la capacidad de subsistir durante una mayor cantidad de años.

Igualmente hay que mencionar que otro de los aspectos más notables que pudieron conocerse con este descubrimiento, consiste en que estas criaturas subsisten dentro de un ecosistema con una cantidad de nutrientes bastante reducida, por lo cual tienen que aprovechar diversas formas de energía, entre las cuales se encuentra el hidrógeno, el metano e incluso la radiación natural de uranio u otras clases de elementos con el fin de sobrevivir.

Además, su estrategia de vida es significativamente diferente a la que usan los organismos que se encuentran en la superficie, dado que invierten un gran porcentaje de su energía únicamente en permanecer vivos sin preocuparse demasiado en crecer.

Hasta ahora fue reportada por la literatura científica la existencia de organismos que tienen la capacidad de subsistir dentro de ecosistemas muy extremos, aunque jamás había sido estimada la densidad que posee este entorno.

Todavía faltan varios meses para que los resultados definitivos de esta investigación sean publicados, pero la verdad es que el aporte de la misma podría hacer reconsiderar los tres dominios de vida: arqueas, bacterias y eucariotas.